Las fases de la enfermedad de Parkinson: Explicadas en

[et_pb_section fb_built="1" admin_label="sección" _builder_version="4.16" global_colors_info="{}"][et_pb_row admin_label="fila" _builder_version="4. 16" background_size="inicial" background_position="top_ft" background_repeat="repetir" global_colors_info="{}16" background_size="initial" background_position="top_left" background_repeat="repeat" global_colors_info="{}"][et_pb_column type="4_4" _builder_version="4.16" custom_padding="|||" global_colors_info="{}" custom_padding__hover="|||"][et_pb_text admin_label="Texto" _builder_version="4.16" background_size="initial" background_position="top_left" background_repeat="repeat" global_colors_info="{}"]No existe un enfoque de "talla única" para la progresión de la EP, por lo que es posible que las etapas de la enfermedad de Parkinson no existan realmente (como en el cáncer). Como tal, no hay un camino lineal en el desarrollo de la enfermedad, y es difícil generalizar la progresión de la enfermedad.Dicho esto, aprender sobre los grados de los síntomas y los tratamientos actuales es muy valioso para saber qué esperar y cómo vivir una vida plena con Parkinson.
¿Por qué es difícil predecir la enfermedad de Parkinson?
El Parkinson es un trastorno neurológico degenerativo causado por una proteína llamada alfa-sinucleína que se acumula en ciertas partes del cerebro. Esto provoca una disminución progresiva de las células productoras de dopamina, fundamentales para muchas funciones corporales, como la coordinación de los movimientos.
¿Cuáles son las causas de la enfermedad de Parkinson?

Aunque la enfermedad está bien estudiada, los científicos aún no saben exactamente por qué se forman estas proteínas. Sin embargo, varios factores parecen desempeñar un papel:
Genética
Se dice que la genética es la causa del 10-15% de los casos de EP. Años de estudio del ADN de personas con EP han revelado docenas de mutaciones genéticas relacionadas con el Parkinson. Algunos de estos genes se heredan o transmiten de generación en generación.
Activadores medioambientales
Ciertas exposiciones ambientales pueden aumentar la probabilidad de desarrollar EP, mientras que otras pueden incluso disminuirla. Por ejemplo, pueden ser los traumatismos craneoencefálicos, la zona de residencia o la exposición a pesticidas, entre otros.
Diagnóstico de la enfermedad de Parkinson
Uno de los principales retos médicos de la EP es su identificación precoz. Dado que los síntomas de la EP coinciden en gran medida con los de otras enfermedades neurológicas, puede resultar difícil diagnosticarla correctamente en sus primeras fases.
Diagnóstico clínico
Actualmente no existe una prueba de laboratorio definitiva para diagnosticar la EP. Los médicos suelen diagnosticar la enfermedad analizando el historial médico de una persona y realizando un examen neurológico. Esto deja el diagnóstico en gran medida a discreción de un profesional clínico a lo largo de meses y, a veces, años de atención y observación.
DaTscan para diagnóstico
Otro medio de diagnóstico es la prueba DaTscan. Esta prueba consiste en inyectar DaTscan, un marcador radiactivo especial, en el torrente sanguíneo. A continuación, viaja hasta el cerebro y se adhiere a las moléculas que se encuentran en los receptores de dopamina, por lo que se utiliza un equipo especial de diagnóstico por imagen para escanear la cabeza y determinar la cantidad de DaTscan presente. Las personas con EP suelen tener una señal menor en la zona del cerebro donde se encuentran las neuronas dopaminérgicas. Aunque un DaTscan negativo no descarta necesariamente la EP, un resultado positivo puede ayudar a confirmarla. Una ventaja es que un DaTscan positivo puede diferenciar la EP del temblor esencial (TE), que no se caracteriza por una deficiencia de dopamina. Sin embargo, un resultado positivo también puede ser indicativo de otras formas de parkinsonismo atípico. En resumen, un DaTscan puede ser muy útil en situaciones concretas, pero no diagnostica necesariamente la EP.Debido a la dificultad de la identificación precoz, algunas personas habrán vivido con EP durante años antes de su diagnóstico. Por lo tanto, las fases y los síntomas asociados a la enfermedad pueden depender del momento en el que se encuentre la persona en su cuidado y tratamiento.
Entender los síntomas de la enfermedad de Parkinson

Por lo general, se experimentan dos categorías de síntomas con el diagnóstico de EP. No todas las personas experimentan todos estos síntomas, y la gravedad de los mismos varía en función de cada caso. Además, algunos de ellos pueden aparecer al principio del diagnóstico, mientras que otros nunca se materializarán.Estos son los síntomas motores de la enfermedad de Parkinson que se observan con más frecuencia:
- Sacudidas y temblores incontrolables
- Movimiento lento
- Dificultades de equilibrio
- Rigidez en las extremidades
Además, los síntomas no motores son igual de comunes, y algunas personas los desarrollan años antes de desarrollar Parkinson o incluso años después. Estos pueden incluir:
- Dificultades de memoria o planificación
- Ansiedad y depresión
- Pérdida del sentido del olfato
- Insomnio
- Fatiga
- Estreñimiento
- Problemas de visión
- Dificultad para tragar
- Problemas de habla
Tradicionalmente, los problemas gastrointestinales (GI) han pasado desapercibidos. Sin embargo, existe un renovado interés por estudiar la relación entre la salud intestinal y la enfermedad de Parkinson debido a su significativo impacto en la vida de las personas. Además de la lista anterior, no es raro experimentar diarrea, hinchazón, ardor de estómago y fluctuaciones de peso.
Teorías sobre las fases de la enfermedad de Parkinson

Incluso sin un enfoque de "talla única" para el diagnóstico, existen años de investigación que pueden orientar la trayectoria general de la EP. En cuanto a los síntomas motores, autores como Hoehn y Jahr han intentado definir cinco etapas principales de progresión.
Los cinco estadios de la EP (Escala de Hoehn y Jahr)
La escala de Hoehn y Jahr (llamada así por sus autores) se publicó en 1967 y fue la primera en describir la progresión de la EP. Sin embargo, esta simplicidad también deja algo que desear cuando se tienen en cuenta las complejidades de la EP, su impacto muy individualizado de una persona a otra y la falta de evaluación de los elementos cognitivos de la EP.Los médicos utilizan este sistema de clasificación para ayudar a evaluar hasta qué punto ha avanzado la enfermedad en alguien que vive con EP. Los estadios 1 y 2 se clasifican como "estadio inicial", los estadios 2 y 3 como "estadio medio", y los estadios 4 y 5 como "estadio avanzado". Tenga en cuenta que no todas las personas que padecen EP llegan a los estadios avanzados de la enfermedad, ya que algunas sólo experimentan síntomas leves.
Primera fase
Esta fase se caracteriza por síntomas leves que no suelen interferir en las actividades cotidianas. Sin embargo, pueden ser tan mínimos que a menudo pasan desapercibidos. Los síntomas incluyen
- Temblor y otros síntomas de movimiento en un solo lado del cuerpo
- Cambios en la postura, la forma de andar y/o las expresiones faciales
En esta fase, la prescripción de medicamentos es un medio muy eficaz para mitigar los síntomas.
Segunda fase
Esta fase se caracteriza por una intensificación de los síntomas del estadio uno. Esto incluye:
- Temblor, rigidez y otros síntomas de movimiento en ambos lados del cuerpo.
- Cambios más drásticos en la marcha y la postura
- Mayor dificultad para realizar las tareas cotidianas
El paso de la primera a la segunda fase puede durar de meses a años.
Tercera fase
Durante la tercera fase, es más frecuente la pérdida de equilibrio y coordinación, lo que aumenta la probabilidad de caídas. Además, los síntomas motores empeoran y los movimientos se vuelven más lentos en general. Aunque la persona puede seguir llevando un estilo de vida independiente, sus actividades se ven algo limitadas.
Cuarta fase
Un marcador importante de la cuarta fase es la pérdida de independencia. Durante esta fase, los síntomas están plenamente desarrollados. La persona puede ponerse de pie o caminar sin ayuda, pero necesita un bastón o un andador para mayor seguridad. Los síntomas son gravemente incapacitantes y la persona ya no puede vivir sola sin ayuda.
Quinta fase
Es la fase más avanzada. La persona puede experimentar rigidez en las piernas que la postrará en la cama o la confinará a una silla de ruedas, y necesitará supervisión constante. Según la Biblioteca Nacional de Medicina, hasta el 50% de las personas en la fase avanzada de la EP experimentan alucinaciones y/o delirios.

La escala MDS-UPDRS
Una de las principales críticas al sistema de clasificación de Hoehn & Jahr es que sólo mide la EP en términos de movimiento. En realidad, el deterioro de las habilidades motoras es sólo una parte de la EP. Otros síntomas, como el deterioro cognitivo, pueden ser significativos e influir en la evolución de la enfermedad de Parkinson.Por ello, a menudo se emplea otro sistema de clasificación, conocido como la Escala de Clasificación de la Enfermedad de Parkinson MDS-Unificada (MDS-UPDRS, por sus siglas en inglés).Creada en la década de 1980, la MDS-UPDRS se perfeccionó para abordar tanto el impacto en las experiencias no motoras como motoras de la vida diaria.La evaluación consta de 50 preguntas dentro de cuatro secciones relacionadas con los síntomas motores y no motores relacionados con la EP. Las cuatro secciones son:
- Sección 1: experiencias no motrices de la vida diaria
- Sección 2: experiencias motrices de la vida diaria
- Sección 3: examen motor
- Sección 4: complicaciones motrices
Dentro de estas secciones hay una serie de formularios de respuesta y cuestionarios que analizan síntomas como el deterioro cognitivo, la psicosis (alucinaciones/delirios), la depresión y la ansiedad, y los problemas de sueño, entre otros.También hay un examen motor y un análisis de las complicaciones motoras. Por último, se formula una puntuación final basada en esta serie de cuestionarios y exámenes para ofrecer una imagen sólida de la progresión de la enfermedad.Aunque este sistema es considerablemente más complejo que el de Hoehns & Jahr, también ofrece una imagen más holística de la progresión de la EP en una población diversa.
Enfermedad de Parkinson de inicio precoz

La evolución del Parkinson también puede depender del momento en que se diagnostica a una persona. La enfermedad de Parkinson de inicio precoz(YOPD, por sus siglas en inglés), también conocida como "de aparición temprana", se da en personas menores de 50 años y es relativamente infrecuente.Según datos de 2020, entre el 3 y el 5% de las personas experimentan YOPD antes de los 40 años. Aunque son muy poco frecuentes, los síntomas de la YOPD pueden empezar a aparecer en una persona a partir de los 20 ó 30 años. Sin embargo, suelen presentar problemas cognitivos con menos frecuencia. Aunque los síntomas de la enfermedad de Parkinson de aparición temprana son similares a los de la enfermedad de Parkinson de aparición tardía, el camino hasta el diagnóstico puede ser significativamente diferente. Los médicos no buscan necesariamente la EPJ ni tienen la experiencia necesaria para tratarla. En consecuencia, los síntomas físicos pueden atribuirse erróneamente a lesiones deportivas o al estrés y la ansiedad. En estos casos, los medicamentos recetados rara vez abordan la enfermedad subyacente. La principal diferencia con las personas más jóvenes que padecen EP es que la progresión de la enfermedad suele ser más lenta con el tiempo. Otras diferencias son:
- Es menos frecuente experimentar problemas cognitivos como la demencia
- Más probabilidades de sufrir distonía, una enfermedad neurológica que provoca contracciones y espasmos musculares involuntarios.
- Mayor probabilidad de sufrir discinesia, una enfermedad caracterizada por movimientos involuntarios como efecto secundario del uso prolongado de levodopa.
El Parkinson de inicio en la juventud puede tener un mayor impacto en la vida de una persona, ya que puede alterar su relación con el trabajo, la familia, el dinero, la escuela y las actividades sociales.Para los jóvenes con enfermedad de Parkinson, es importante buscar un médico (junto con especialistas como los especialistas en trastornos del movimiento) que pueda adaptar un plan de tratamiento para satisfacer las necesidades y objetivos individuales es importante. Luego, con el apoyo adecuado, es realmente posible vivir bien con la enfermedad.
Tratamiento e impacto en la progresión de la enfermedad de Parkinson

Tras el diagnóstico, el mejor paso siguiente es consultar a un especialista en trastornos del movimiento. Un especialista en trastornos del movimiento es un neurólogo especializado en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades neurológicas que afectan al movimiento, como el Parkinson. Por ejemplo, un especialista puede ayudar a crear un plan de tratamiento individualizado que puede incluir medicamentos, fisioterapia y cambios en el estilo de vida.También pueden ayudar a controlar sus síntomas y efectos secundarios y proporcionar apoyo y recursos para ellos y sus familias. Además, acudir a un especialista en trastornos del movimiento puede ayudar a garantizar que una persona reciba la mejor atención y el mejor tratamiento posibles para el Parkinson.
Levodopa
La levodopa se considera uno de los medicamentos más potentes para la EP. A menudo es la primera línea de defensa a la que acude un médico cuando se plantea el tratamiento y la gestión de los síntomas. La respuesta a la Levodopa influirá en el desarrollo de la EP. La Levodopa suele utilizarse junto con la Carbidopa para reducir los síntomas de náuseas y vómitos. En forma de pastilla, actúa viajando hasta el cerebro a través del intestino delgado, donde se convierte en dopamina. Este suplemento de dopamina es fundamental, ya que ayuda en las funciones motoras diarias, como vestirse, caminar y manejar utensilios.Los estudios no son concluyentes sobre si la Levodopa ralentiza o no la progresión de la EP. En un estudio de 2019, la investigación sugirió que, aunque la Levodopa no ralentiza necesariamente la progresión de la EP, es seguro tomarla en las primeras fases de la enfermedad. De hecho, hacerlo ayuda a controlar los síntomas típicos y a mantener una calidad de vida más agradable.
Tratamiento quirúrgico
Normalmente, el tratamiento quirúrgico sólo se explora para quienes no pueden controlar sus síntomas con medicación. Existen dos formas principales de tratamiento quirúrgico: La estimulación cerebral profunda (ECP) y la Duopa.
Estimulación cerebral profunda
La ECP funciona insertando electrodos en una zona específica del cerebro. A continuación, se coloca una batería generadora de impulsos (denominada IPG) debajo de la clavícula o en el abdomen para administrar una estimulación eléctrica a las zonas del cerebro que se desea tratar. Sin embargo, muchas personas experimentan una reducción de los síntomas de la EP y un consiguiente aumento de su calidad de vida.
Duopa
Duopa es una forma de Levodopa-Carbidopa que suministra el medicamento directamente al intestino en forma de gel. Para ello, se practica un pequeño orificio (un "estoma") en el abdomen del paciente, se introduce un tubo en el intestino y se utiliza una bomba para administrar el gel. Puede que no ralentice la progresión de la enfermedad, pero los síntomas son más fáciles de controlar.
Fisioterapia y logopedia para la enfermedad de Parkinson

La incorporación de una combinación de terapias a la rutina de una persona puede mejorar o aliviar los síntomas comunes de la EP.Está demostrado que la fisioterapia, que incluye el entrenamiento de la marcha y el equilibrio, el entrenamiento de resistencia y el ejercicio regular, ayuda con el equilibrio, la postura, el dolor y la movilidad en general.La logopedia es clave para potenciar las habilidades comunicativas y la confianza. Las investigaciones demuestran que hasta el 89% de las personas con EP experimentan cambios en el habla. Esto puede ir desde una disminución del volumen, una reducción de la claridad y/o una calidad vocal ronca, entre otros.Trabajar con un logopeda ayuda a las personas con Parkinson a mantener una comunicación eficaz a medida que su enfermedad progresa.
La enfermedad de Parkinson y un estilo de vida saludable
Estudios recientes sugieren que un poderoso antídoto contra la EP puede empezar en casa. Incorporar comidas nutritivas y ejercicio regular a la rutina diaria puede ralentizar el avance del Parkinson.
Alimentos que ayudan a aliviar los síntomas

En general, los médicos recomiendan una dieta a base de frutas, verduras y proteínas magras para ayudar a ralentizar o aliviar los síntomas de la enfermedad de Parkinson. Además, las personas con EP deben controlar su consumo de azúcar y sal e incorporar alimentos ricos en antioxidantes. Entre ellos se incluyen los ricos en vitaminas C, E, A y betacaroteno:
- La fibra de las frutas, las verduras, las legumbres y los cereales integrales puede ayudar a aliviar el estreñimiento.
- Los hipertensos deben evitar los alimentos ricos en sodio. Demasiada sal puede ser perjudicial para los riñones.
- Los alimentos ácidos, condimentados o carbonatados pueden ayudar a la producción de saliva, facilitando la deglución.
- Se ha demostrado que el agua tónica, el zumo de pepinillos y el vinagre reducen los calambres musculares.
- El alcohol debe beberse con moderación, si no se elimina de la dieta, ya que puede exacerbar aún más los problemas de equilibrio y/o los problemas de salud no relacionados con la EP.
Además, los expertos publicaron en 2022 una investigación que sugiere que el consumo de alimentos ricos en flavonoides puede ayudar a reducir las tasas de mortalidad en la comunidad de enfermos de Parkinson. Los flavonoides son compuestos antioxidantes presentes en alimentos de colores vivos, entre ellos:
- Arándanos
- Chocolate negro
- Té
- Fresas
En general, la "buena alimentación" repone las vitaminas y minerales esenciales, refuerza la vida sana y protege contra los factores ambientales nocivos.
Ejercicio para aliviar los síntomas

El Parkinson's Outcomes Project muestra que al menos 2,5 horas de ejercicio a la semana pueden ralentizar la progresión de los síntomas de la EP y el deterioro general de la calidad de vida. Además, la remisión a fisioterapia en una fase temprana del diagnóstico puede ayudar a evitar hospitalizaciones y caídas. La incorporación del ejercicio como parte habitual del plan de tratamiento de una persona puede ayudar a ralentizar la progresión de determinados síntomas motores y cognitivos. Pruebe estas opciones de ejercicio en casa especializadas para personas con EP.
Practicar el autocuidado
Una parte importante de mantener un estilo de vida saludable es fomentar la salud mental. Esto incluye dar prioridad a un horario de sueño constante, mantenerse en contacto con una red social y dedicar tiempo a las aficiones.Como persona a la que se le acaba de diagnosticar EP, aislarse puede ser especialmente perjudicial para la salud mental de una persona, provocando ansiedad y depresión. Para contrarrestar esto, busque grupos de apoyo, sesiones en persona y eventos para mantenerse en contacto con personas de la comunidad de la EP. Además, llevar un diario puede ayudar a procesar las emociones que rodean al diagnóstico y a hacer un seguimiento de los síntomas y controlar su evolución a lo largo del tiempo.Aunque todavía no existe una "cura para todo" para la enfermedad de Parkinson, estos métodos de tratamiento han demostrado ser eficaces para controlar algunos de los síntomas más difíciles de la EP y contribuir a un aumento general de la calidad de vida.
La enfermedad de Parkinson es altamente individualizada

La trayectoria de una persona con enfermedad de Parkinson no será igual a la de otra. Algunas personas sólo experimentan síntomas leves o moderados de EP a lo largo de su vida. Además, los síntomas pueden empeorar a lo largo de muchos años, si es que empeoran. Se ha demostrado que una combinación de medicación, terapias físicas y del habla, y una vida sana alivian los síntomas y, en algunos casos, evitan la rápida progresión de la EP. No dude en ponerse en contacto con PCLA para obtener apoyo y recursos que le ayuden a vivir una vida fructífera y unirse a nuestra próspera comunidad de EP.[/et_pb_text][/et_pb_column][/et_pb_row][/et_pb_section]
Done hoy,
cambiará vidas para siempre
PCLA funciona gracias a las generosas contribuciones de personas como usted.
Por favor, considere la posibilidad de donar hoy para que podamos seguir proporcionando apoyo crítico a los afectados por el Parkinson.